La sang de l´automne- avec ses pruniers nus- chante quand les enfants enroulent ses feuilles en toiles jaunes et seulement le sapin regarde impassible- patine vert dans un indigo venteux- la forge des oiseaux. Les ombres dorment sur le verge du cadran solaire tandis qu´une japonaise avec son appareil photo dénonce le préface/le prologue du hiver.
Nids vides
La sangre del otoño -con sus ciruelos desnudos- canta cuando los niños envuelven sus hojas en lienzos de amarillo y sólo el abeto mira impasible- patina de verde en un añil ventoso- la fragua de pájaros. Las sombras duermen a la vera del reloj de sol mientras una japonesa con su cámara delata el prólogo del invierno.
Nidos vacíos